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Enhebrando la agricultura, los ecosistemas y la alimentación: relaciones entre humanos y abejas en Anolaima, Colombia

​   Detrás toda taza de café, ensalada de frutas y barra de chocolate hay cientos de polinizadores que sirven como eslabones entre los bosques, los campos agrícolas y la alimentación. Los insectos, especialmente las abejas, medían la producción de aproximadamente un ~ 85% de las plantas cultivadas en los trópicos, siendo componentes esenciales pero –en LatinoAmérica poco invisibles– de la seguridad alimentaria. Actualmente las abejas, los agroecosistemas tropicales tradicionales, y la memoria biocultural que ellos albergan están en peligro por la expansión de la agricultura industrial. Mi proyecto busca investigar el repertorio cultural por el que los campesinos tradicionales de Anolaima, Colombia, se relacionan con las abejas y con los agroecosistemas, y las implicaciones que tales relaciones tienen sobre las poblaciones de abejas y la seguridad de los medios de vida rurales. 

Las abejas y la agricultura

(o algunos de los alimentos que las abejas ayudan a producir en Anolaima)

La gente  y las abejas

Las abejas y los ecosistemas

 

 

 

Los campesinos y la agricultura

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

               

Anolaima es conocida como la capital frutera de Colombia. Esta inscripción recuerda a los anolaimunos su identidad campesina y los invita a abrazar la tierra y su cultura con orgullo. Actualmente la agricultura en Anolaima se está erosionando, al igual que esta inscripción.

Los campesinos que desarrollan prácticas tradicionales siempre conocieron y abrazaron los ritmos y el fluir de la naturaleza. En esta antigua habitación la ahuyama crece en relación con humanos y otros no humanos como abejas polinizadoras.

La cocina, el lugar donde el conocimiento, la práctica y los sentidos se unen para preparar alimentos que nutren el cuerpo y el alma. En ese momento registré por lo menos cinco alimentos que requirieron de la ayuda de un polinizador animal para ser fruto.

El alimento se provee –no solo a los humanos: "hay para todos".

Y el cuidado también se provee a humanos y a no humanos.

Los observador@s son curiosidad, son investigador@s innatos. Estas orugas llegaron en grupo a un árbol de casco 'e vaca y fueron guardaditas en un balde hasta que completaron la metamorfosis. Quien los cuidaba quedó un poco decepcionada: emergieron unas polillas no tan coloridas. "Igual tienen su gracia", dijo doña Ligia.

La mayoría de cultivos transitorios en Anolaima se producen con la "ayuda" de agroquímicos industriales, incluyendo Lorsban y Furadan. Niños de seis años conocen los nombres y usos de esos productos. Crecer en medio de agrotóxicos es entonces normal en esta región.

El RoundUp y Lorsban son compañeros requeridos por muchos agricultores. Varios respetados "urbanitas" que regresaron al campo confían en su eficiencia entonces, ¿porqué no habrían de usarlos los campesinos?

La producción puede incrementar con el uso de agroquímicos sintéticos. Sin embargo la productividad no es garantía de rentabilidad. Los campesinos pueden recibir $50.000 COP por un bulto de guatilas. La semana siguiente ese mismo bulto es pagado a $5.000 COP.

La tierra se ha degradado tanto en algunas áreas y el manejo agrícola es tan agresivo que ningún agroquímico puede pelear contra (o "mejorar") la naturaleza.

A pesar del preocupante camino hacia la modernidad agrícola en Anolaima, algunos campesinos resisten estos cambios al abrazar la caótica belleza de la vida a través de la tradición. Esta planta de guatilas solía producir frutos blancos sin espinas. Los polinizadores hicieron "de las suyas" y ahora las personas cuentan con una nueva variedad de frutos– que representan también nuevos sabores y texturas para disfrutar.

Algunas áreas en el municipio están bien protegidas: las zonas cafeteras. El problema es que el café como cultivo es menos rentable que nunca, en especial después de las altas temperaturas y la sequía que trajo el fenómeno del Niño en 2015. Mucha gente está tumbando sus cafetales para cultivar transitorios (o follajes), o para tener pastos y más ganado.

El uso agresivo de la tierra deja su huella a escala de paisaje. Las fincas con manejo tradicional parecen pequeños oasis inmersos en océanos de tierras dedicadas a la producción agroindustrial, la ganadería o las fincas recreativas de personas de la ciudad.

En ciertas partes ni siquiera las fuentes de agua son protegidas, especialmente en esas zonas donde la ganadería se ha vuelto el uso del suelo más común.

Las abejas sin aguijón no pican pero algunas sí muerden. Algunos apicultores prefieren mantener las cosas bajo control y tratan a las abejas sin aguijón también con cautela.

Los apicultores (de abejas de la miel y abejas sin aguijón) tienen esta increíble amalgama de conocimientos. Saben dónde es más probable encontrar nidos, cómo capturar abejas en el aire con sus manos y, de alguna forma, diferencian especies de abejas sin aguijón que podrían ser muy similares a nuestros ojos humanos.

Cuidar a las abejas incluye saber quiénes son sus enemigos: removerlos y preservarlos para aprender más de ellos –y cómo combatirlos. Lestremelitta limao, una abeja cleptoparásita (que roba a/en los nidos de otras abejas) invadió una colmena que mantenían Reinaldo y Javier. algunos de los enemigos capturados aún tienen las pequeñas cabezas de las víctimas –que murieron peleando– ancladas a sus alas.

Las estrategias para proteger a las abejas de sus enemigos incluyen mallas, rejas y trampas, pero sobre todo observación.

El bonito meliponario (apiario de abejas sin aguijón - meliponinas) de la familia Luna, un lugar de miel y tradición.

Extracción de miel de meliponinos (abejitas sin aguijón). Sólo se extrae cuando es necesario, y a veces necesario significa "cuando hay oportunidad de contagiar a alguien con la magia de las abejas"

A pesar de saber mucho sobre abejas, las abejas solitarias son desconocidas. Cuando pregunto, muchas personas confunden ciertas abejas con moscas. Fue confuso ver a una abeja del sudos (Halictidae) visitando su piel humana [de Reinaldo]. (No en esta imagen pero: el gesto de sorpresa que hizo uno de los amigos apicultores al ver por primera vez una abeja Euglossa no tiene precio)

Los no-apicultores pueden saber más sobre las abejas solitarias –y cómo coexisten con los humanos. Una abeja cortadora de hojas acompañaba a doña Martha en su cocina. Ella sabía sobre el nido y tenía el fuerte presentimiento de que lo habían abandonado.

A veces es imposible estar lejos de las abejas, especialmente si son dulces y dóciles. Tetragonisca angustula, la "angelita-angelita", construye nidos en varias estructuras, entre ellas muros construidos por humanos. Las personas son muy cuidadosas de no barrer estas huéspedes especiales.

Las anfitrionas de la casa de doña Ligia

A T. angustula también le gusta anidar en el corcho de los árboles. Los campesinos son los mejores encontrando y cuidando estos nidos.

A las euglossinas también les gusta compartir espacios con los humanos. He encontrado varios nidos cerca a baños y en equipos de sonido (en deuda la imagen). Las personas no saben que son abejas y creen que son moscas transmisoras de enfermedades, así que a veces las combaten sin saber.

Omnidia robusta, la mosca que al vuelo parece una abeja euglossa.

Varias abejas también son confundidas con moscas de la familia sarcophagidae

Un condominio de Euglossas, parte 1

Un condominio de Euglossas, parte 2

Un condominio de Euglossas, parte 3: El futuro en el presente

Una mirada cercana a la habitante (ella y sus crías aún viven en el condominio. El guardián humano me contó que, en la última revisión, vió que la familia está creciendo)

Otro condominio de abejas, esta vez de Centris, Diadasia y Megachile. El humano dueño de la construcción está preocupado de que, con su peso, las abejas puedan tumbar el muro.

Las abejas boca 'e sapo (Partamona sp.) también hacen sus nidos sobre construcciones humanas. Estos nidos son hechos con barro y distintas resinas, así que son pesados. Si crecen, sí pueden desestabilizar construcciones humanas.

Cuando hay oportunidad, crecer es la opción. Todos los materiales son permitidos para estas maestras de la bioconstrucción.

Observando. Virginia Nazarea dice que siempre hay personajes "irreverentes" que mantienen las memorias bioculturales vivas. Estos personajes son observadores innatos como mi amiga... siempre observando, siempre queriendo aprender y deseando enseñar.

Los campesinos saben que las abejas son importantes "por que polinizan" pero no entienden qué es exactamente la polinización. Sí saben que, cuando se mezclan variedades de calabacín, los intermediarios y/o consumidores las rechazan y esos frutos no se venden.

Los campesinos en Anolaima beben guarapo desde hace mucho tiempo. Solían almacenarlo en múcuras y luego en chocos (fruto de una cucurbitacea). Muy probablemente la producción de estos chocos es facilitada por abejas polinizadoras. Ahora ya no hay casi chocos (ni las plantas que las producen) en Anolaima: erosión biocultural.

Un jardín de apicultor: flores, flores y más flores para abejas y humanos

Para saber qué funciona, hay que observar cuidadosa y frecuentemente. Y prototipear, y protetipear, y prototipear... Don Gustavo es un experto en esto

Experimentos para mantener abejitas sin aguijón

Innovando: extracción de miel de meliponinos

Innovando y compartiendo: extracción de miel de meliponinos

¿Cómo viajan los saberes? entre la gente :)

Las construcciones humanas son importantes para las abejas y entonces, lugares de encuentro claves en estos socio-ecosistemas

Este bejuco de Ipomoea es resistente al RoundUp. Sus flores, las únicas abiertas luego de la aplicación de herbicidas, son visitadas por abejas del género Diadasia.

Las abejas obtienen alimento pero también otras cosas cuando visitan las flores de Ipomoea en estos cultivos (como residuos de biocidas). Las Diadasia son abejas muy rápidas e inquietas, pero en este borde de cultivo siempre están adormecidas... probablemente intoxicadas y tan lentas como para que yo hubiera podido fotografiarlas.

Las hierbas como el tabaquillo proveen alimento para las abejas. Muchas arvenses son ignoradas o desconocidas (llamadas en conjunto rastrojo), a menos que tengan una propiedad ailmenticia o medicinal importante para la comunidad.

A veces las abejas Eulaema anidan masivamente en hormigueros. Hay muchas entradas, grandes y pequeñas, para cada tipo de habitante. Este gran nido fue removido cuando se quizo ampliar la carretera para acceder a esta vereda hace un par de meses.

Paratrigona en flor de rosa

A algunos halíctidos y eucerini les gustan estas flores de amapola. La gente también ama estas plantas.

Siempre hay enemigos peligrosos

Pocas plantas ornamentales son atractivas para las abejas. Aquí una que sí es un recurso para halíctidos.

Durante las fiestas del Corpus Christi los campesinos ofrecen los frutos de sus territorios para agradecer por la cosecha que pasó y pedir por un buen nuevo ciclo. Así, crean figuras con frutas y vegetales como esta mariposa. Las plantas que producen choco (cabeza de la mariposa), calabaza, zapallo, cítricos, y mango, entre otras, se benefician de la polinización animal para reproducirse –y entonces producir los alimentos que consumimos.

La mejor modelo del mundo :)

Las plantas que producen cítricos y cubios (dientes del caballo) se benefician de la polinización animal para producir frutos. Las abejas AMAN el polen de las flores de esta palma (el pelo del caballo).

Al finalizar, los campesinos desmontan las figuras de frutas y venden los alimentos a muy bajos precios a los turistas. La cosecha de 2015 se afectó severamente por la sequía que trajo el fenómeno de El Niño. Sin embargo, la tradición no se pierde: las frutas de los arcos se compran en Bogotá, aunque venga de otros lugares.

Marcela Cely Santos. Made by  Wix.com.

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